HISTORIA DE MINISTERIOS FEMENILES
- MINISTERIOS FEMENILES
- IGLESIA IBEROAMERICA 2805 Belgrave Ave., Huntington Park, CA. 90255, United States
- Despues de 11 años de la formación de las Iglesias de Asambleas de Dios, en 1925, Etha Calhoud organizó un grupo de mujeres para la oración intercesora en Houston, Texas. En un principio, se reunian sólo para hacer oracion por los misioneros, y despues encontraron otras maneras para brindar apoyo tanto a los misioneros como para la Iglesia local. Asi fue como se formó el primer Concilio de Mujeres, precursor de Ministerios Femeniles de hoy en dia.
MUJERES UNIDAS PARA VENCER
jueves, 11 de septiembre de 2008
Salvacion Por hna. Ana Leal.
Dios me las bendiga hermanas, mi nombre es Ana Leal y este testimonio es de la salvación de mi madre, que ya esta ante la presencia de Dios.
Siempre que oraba a mi Señor, le decia --Yo te ruego, mi Dios, que mi madre sea salva, permiteme, que ella reciba a Jesus antes de morir, no importa que sea en el ultimo momento, antes de que ella parta contigo, Señor--. Y tambien le suplicaba humildemente que cuando el dispusiera de su vida, que fuera en tiempo que yo pudiera estar con ella, y el Señor escuchó mi ruego.
Mi madre partió este año el 19 de abril. Y me permitió estar con ella hasta el ultimo momento; y lo mas lindo, que ella acepto a Jesucristo como su Salvador dos dias antes de morir. Yo le dije ---madre, --quiere que ore por usted?-- Y ella me dijo que si, que oraramos mi hermano y yo, pues los dos somos cristianos, entonces le pregunte si queria hacer la oración, repita conmigo y asi lo hizo, ese dia jueves ella se entregó a Cristo Jesus y el sabado murió.
Mi madre era catolica de hueso Colorado, pero Dios le permitio en sus ultimos momentos que ella se entregara y ahora yo se que ella descansa en los brazos del Señor a la edad de 92 años.
Hermanas, yo le quiero agradecer a Dios con toda mi alma y corazon el haber escuchado mi petición, ella murió en mis brazos, vi como se me iba, pero quiero decirles que en el momento que mi madre comenzo a agonizar, senti un calor, una fuerza inexplicable en todo mi ser y pude estar serena, ayudando a mi madre en su muerte, orando y diciendole que la amaba, que se fuera tranquila, en paz, que todo iba a estar bien, y pidiendole al Señor que la recibiera. Asi ella dio su ultimo suspiro, y yo, hermanas, fuerte, entera, con una fortaleza que todavia me dura, claro, la extraño, me hace falta pero ese vacio que ha dejado el Señor lo llena con su infinito amor. Hermanas, para Dios no hay nada imposible. Dios es grande, misericordioso y poderoso, el siempre contesta las peticiones de nuestro corazón, Dios es fiel.
Solo ten una fe profunda y el lo hara. Gracias hermanas porque sus oraciones por mi, el Señor contesto, me dió fortaleza. Dios me las bendiga. Hermana Ana Leal.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario